10 agosto, 2005

JENGIBRE PARA LOS DUENDES

“Estarás esperándolo hasta entonces con corona de reina
en el enmarañado fondo del jardín”.
LA CORONA FINAL / Olga Orozco.

Encuentro a Jonu sentado
en la orilla de la luna,
con el jirón de un sueño
atado a su pecho;
en sus ojos están
las llamas de todos los infiernos,
un espiral de recuerdos
sale de su boca.
En su alma: relámpagos.
En mi garganta: una hoguera.
Después de haber sido
prisionero en un palacio de sal,
de cumplir sus condenas,
y cruzar el huerto

de los frutos podridos,
Jonu regresa aquí,
al único lugar donde

será siempre inmortal:
la orilla de la luna.

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